POR FIN HA LLEGADO: EL AULA DEL FUTURO.

Que menos que la primera entrada que publique en cada uno de los portafolios digitales de la asignatura al tratarse de un contenido transversal de nuestra mención trate sobre las Aulas del Futuro, pues por primera vez he tenido la oportunidad de observarla en todo su esplendor. De más está decir que hay un Aula del Futuro referente en cada región del país, y la de nuestra facultad es la primera de la región; esto es, la primera de Castilla-La Mancha, en palabras del docente Ricardo Fernández; aula que sigue el plano preconcebido de trabajo por rincones y aúna todas las características para convertirse en una enorme oportunidad para el aprendizaje de docentes y alumnos /asa partes iguales.

Se quedan cortas las palabras para expresar la emoción, el gusto y la admiración por lo que serán las futuras clases en las que nosotros mismos estaremos al frente en no tanto tiempo como el que podría parecer; y disfrutaremos junto al alumnado de todos y cada uno de los recursos y posibilidades que tiene que ofrecer esta instalación.

Recuerdo cuando el aula 36.1 era una simple clase de informática más, con mesas dispuestas verticalmente, contando con aparatosos ordenadores cubriendo a los alumnos, a nosotros; así como esa escasa distribución del espacio. Pues bien, todo ello ha sido sustituido por un espacio completamente novedoso, amplio y predispuesto para un aprendizaje significativo y funcional. Aún a pesar de no estar completa, las posibilidades a ofrecer son enormes.

¿Y en qué consiste exactamente la llamada Aula del Futuro? Hablando desde mi experiencia tras el primer día de clase (sin haber profundizado en el tema previamente), puedo decir que en esencia se trata de un espacio donde se fomente e incentive el trabajo por rincones, contando con mesas circulares en las que los alumnos puedan verse unos a otros promoviendo y facilitando aún más esta iniciativa. A su vez, dichas mesas son móviles, por lo que es fácil redistribuir el espacio para la puesta en marcha de una actividad en gran grupo o grupos reducidos, por ejemplo; a la vez que pueden retirarse para crear un gran espacio cuando la situación así lo amerite; por no hablar de los armarios ingeniosamente predispuestos para disponer de material en todo momento. En resumen, cambiar la distribución de aula en función de la metodología a aplicar (trabajo cooperativo, colaborativo, en gran grupo...).

De la misma manera, al fondo del aula se halla una "esquina" con una serie de sillones (móviles) que cumple la función de "auditorio". ¿Qué quiero decir con esto? Que en ese espacio los alumnos podrán compartir sus experiencias con el resto de la clase de un modo mucho más distendido que al frente con todas las miradas centradas en ellos, o incluso presentarse al inicio de curso. Eso mismo fue lo que hico el docente Ricardo con el alumnado de TICE de 3º, junto con los robots Dino y Dina, los robots sociales interactúan y se comunican con las personas.

Si abarco una concepción más teórica referida a las Aulas del Futuro (una vez llevada a cabo un estudio sobre el concepto) el soporte y orientación sobre la propuesta del Aula del Futuro a las comunidades educativas de todo el país,  se fundamenta con la creación en 2015 de la red de embajadores del Aula del Futuro (AdF) en colaboración con las comunidades autónomas, que cuenta con representación en todas ellas. 

En 2017, el entonces Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, inauguró el Aula del Futuro del INTEF, con el objeto de brindar oportunidades de formación y desarrollo profesional docente. Para ello, y siguiendo el modelo europeo, se propuso crear un departamento similar al de la clase de Bruselas, incluyendo una nueva “área de estudio” que permitiera a los alumnos ascender a la clase que es la base de su formación. En concreto, las áreas de aprendizaje del futuro aula INTEF son: Explora, Interactúa, Investiga, Diseña, Crea y Presenta.

El objetivo de este aula por tanto es que los docentes vean en la propuesta un modelo de referencia que promueve el uso de un enfoque positivo en la creación y organización de espacios flexibles en la escuela para promover cambios metodológicos en la práctica docente diaria. Cada aula individual se adapta entonces a su entorno: debe satisfacer las necesidades de los alumnos que la utilizarán y adaptarse al trabajo que se desarrollará. El Aula del Futuro no es esencialmente un espacio físico, mobiliario o tecnológico, sino un espacio experimental para mejorar el aprendizaje de los estudiantes.

Para comprender mejor el término, se adjunta un esquema de las Aulas del Futuro, con cada una de sus respectivas áreas de aprendizaje:

Aula del futuro
Tomado de https://intef.es/tecnologia-educativa/aula-de-futuro/

Así, como se aprecia y mencionó con anterioridad, este espacio consta de varios rincones claramente distinguibles y con funciones únicas: en uno podrán crear y planificar sus propios trabajos; en otro podrán emplear herramientas como tablets; en otro podrán presentar sus trabajos; se incentivará el aprendizaje basado en proyectos y la investigación del alumnado; la colaboración alumno/a-docente; y, en el último de ellos, se fomentará la autonomía del alumnado. Cada rincón a su vez recibe su propio nombre.

El Aula del Futuro del que se dispone en la facultad sigue este mismo esquema y ya desde el primer día pudimos experimentar con recursos TIC destinados a la educación, como los robots Dino y Dina ya citados o el Merge Cube, para experimentar y disfrutar con la realidad aumentada desde un dispositivo móvil, entre otros. 

Robot social interactivo Dino
Elaboración propia

Merge Cube
Elaboración propia

Lo más particular de este primer día de emociones es que en ningún momento el docente nos indicó que hacer o a donde ir, sino que simplemente se limitó a colocar los recursos en cada uno de los rincones y dejarnos disfrutar de sus posibilidades.

En definitiva y a modo de conclusión, ver con mis propios ojos, y lo mejor de todo, disfrutar de un Aula del Futuro, la primera de la Facultad de Educación de Toledo, supone para mí una experiencia y oportunidad de aprendizaje y reflexión única e irrepetible. No puedo dejar de maravillarme con las posibilidades que el mañana tiene para ofrecernos; pero sobre todo, dejar a un lado las metodologías tradicionales con las que hemos crecido todos nosotros. Seremos maestros y maestras del siglo XXI, comencemos a pensar como tal.

BIBLIOGRAFÍA:

Aula del futuro. (s. f.). Recuperado 21 de septiembre de 2022, de INTEF website: https://intef.es/tecnologia-educativa/aula-de-futuro/

Jover, G. (2022, enero 1). Aulas del futuro. Recuperado 20 de septiembre de 2022, de Hoy.es website: https://www.hoy.es/extremadura/aulas-futuro-20220101074523-ntvo.html